sábado, 9 de diciembre de 2017

Ni mucho, ni poco

Hace poco he leído sobre el concepto sueco lagom, que es como el sucesor del concepto danés hygge, tan reconfortante. Lagom es el equilibrio, el comer saludable sin renunciar al placer, el saber cuándo parar, cuándo es suficiente, cuándo darte un capricho sin que acabe siendo un exceso.

En esta época es fácil caer en el mucho y aunque yo sea de las que creo que cuanto menos se consume, más probabilidades hay de que todos salgamos adelante (incluidos los pingüinos), soy consciente de que es nadar muy a contra corriente pretender hacer una Navidad de cero consumo. Siendo realistas, y teniendo en cuenta el equilibrado lagom, sí que se puede hacer una carta a los Reyes moderada y además, respetuosa. Aquí os dejo algunas ideas.


Una sesión de fotos con Raquel Biempica Fotografía.

http://www.raquelbiempica.com/

Me encantan sus fotos: luminosas, naturales, espontáneas, risueñas. Es verlas y alegrarme el día, así que me imagino tener todo un álbum de fotos propias hechas al estilo Raquel... ¡una alegría para toda la vida!


Una subscripción a la revista Opcions.

http://opcions.org/es/suscripcion/

Para estar informados, para saber qué hay detrás de las grandes marcas, para descubrir que hay opciones cuando las necesitamos.


Jabones, cremas, champús o velas de Botànica.

https://albaguiluzbotanica.com/tienda/

Aún me queda una pastilla de jabón de mi última visita al Mediterráneo y cada vez que me meto en la ducha es como volver a visitar los bosques del interior de Tarragona, con su olor a romero, tomillo y pinaza.


Un jersey de Iaios.

http://www.iaios.org/

Creo que para una persona que se compra cero ropa durante el año, que el calendario de Adviento me traiga unos calcetines, el Tió me cague unas braguitas y los Reyes me traigan un jersey Astrid Lindgren es más que equilibrado ¿no?

Un libro DIY electrónico de Demodé



Me encanta que los comienzos coincidan, es como cuando el año empieza en lunes, por eso con un libro de Demodé se puede empezar el año, un libro y algo nuevo que aprender.

Un abanico de Olelé.

https://olele.es/tienda/

Porque ya son un clásico, porque no me imagino ninguna pieza de artesanía hecha con más cariño, más estilo, ni más esmero que los preciosos abanicos de Olelé.


Y, claro, también un calendario de la Marmota.

http://latienditadelamarmota.bigcartel.com/product/calendario-de-la-marmota-2018

Porque vuelven a haber unos cuantos en la tienda y porque es una manera de recordar que el año también puede pasar lento, fluido y acogedor, como las fotos analógicas, como el hygge y como el lagom.

¡Salud!

4 comentarios:

  1. En mayo fui a Dinamarca y descubrí el Hygge. El próximo mayo programo ir a Noruega y hace poco descubrí el Lagom. Las fuerzas invisibles de la naturaleza quieren decirme algo. Sin duda. Aunque yo pensaba que ya esos conceptos los tenía interiorizados... Ahí lo dejo... ;)

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    1. Creo que son más difíciles de interiorizar de lo que nos parece y más con el ritmo que llevamos y la cantidad de distracciones que tenemos. Tengo que volver a Escandinavia, ¡antes de que se deshiele! Gracias por comentar :-*

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