Hay dos señales inequívocas de que la primavera se acerca a Salzburgo. Una es esta...
La otra es un suave pero constante aroma a estiércol que flota por toda la ciudad. Esta última señal aún no la han notado mis sensores, aunque no tengo claro si es por mi congestión o porque realmente aún no ha llegado.
Llamadme pesimista si queréis, pero yo de estas señales tan tempranas no me fío ni un pelo. Creo que la primavera aún se va a hacer de rogar un poco. Por eso hago acopio de vitaminas por si las moscas...
La manera más tradicional de tomar mucha vitamina C en estas tierras es el Sauerkraut, ya que las naranjas llegan de lejos y no son baratas.
Consiste en col blanca fermentada con sal. Aquí también le ponen alcaravea, pero vaya, que supongo que cada región le dará sabor con diferentes especias.
Normalmente se encuentra acompañando salchichas o carnes. Pero la revista Lecker propone una versión en sopa que tenía muchas ganas de probar.
Es de esos sabores que o bien los amas o los odias. Yo lo amo y el Tonisito lo odia, por eso esta sopita va a ser toda, todita pa la nena!!!!
Sopa de Sauerkraut
Ingredientes (para dos, pero toa pa miiiii!!!)
un chorro de aceite de oliva
una cebolla mediana cortada pequeña
una pizca de tomillo
un par de patatas medianas cortadas en pedazos que quepan en la boca
una cucharada de salsa de tomate
medio litro de caldo de verduras
un cuarto de kilo de Sauerkraut
sal y pimienta al gusto
unas lonchitas de chorizo (es la semana "¡Viva España!" del super Merkur... ¡que vivaaa!)
En una olla se pocha la cebolla con un poco de sal, el tomillo y el aceite. Se echan las patatas y la salsa de tomate y se da unas vueltas. Se añade el caldo de verdura y se deja cocer unos 10 minutos. Se añade el Sauerkraut y se deja unos 10 minutos más.
Se fríen las lonchitas de chorizo en una sartén.
Se adereza la sopa al gusto y se sirve calentita con las lonchitas de chorizo crujientes.
Lo que yo no sabía es que esta sopita también me va a proporcionar las bacterias esas tan buenas que llevan ahora todos los yogures. ¡Adiós a mi congestión! Además es sin gluten siempre que se tenga mucho cuidado al elegir el chorizo. Para vegetarianos, se puede sustituir el chorizo por una pizca de pimentón del bueno en el momento de servir.
¡Salud!
Sauerkraut con aceite de oliva y chorizo!! viva el sincretismo!! :) Qué rico tiene que estar eso.
ResponderEliminarYo soy de los tuyos también, así que congélate un poco del mejunje ese y me lo mandas por DHL o asín (compartir es vivir, eh!).
Aquí en el Mediterráneo, como no hay estaciones... sólo hay una: soltolrato...para alguien atlántico, como yo, es un poco aburrido, así que ya me gustaría tener nieve y frío y florcitas que anuncian que todo eso se acaba.
Hala! Ponte otro tazón!
¿Sopa de Sauerkraut? Pues mira, te voy a copiar y me haré una pa mí sola, que parece que por aquí tampoco hace mucha gracia la col... ;)
ResponderEliminarLo del estiércol, quizá no os haya llegado el aroma porque el viento soplaba en contra, porque lo que es de Bergheim para arriba está todo cubierto, oyes, perfume "eau de vache" del bueno.
Yo tampoco me fío de las señales primaverales... con esto del cambio climático el tiempo se está volviendo loco (este mes de octubre pasado yo aún andaba por Bcn con camiseta de tirantes).
ResponderEliminarJooo... no me gusta la col :-( ¿Propones algún otro ingrediente alternativo o tendré que arrojarme a las naranjas?
Petonets!
Hola! Por aquí ya han echado el estiercolillo también y el otro día vi el Bärlauch. Yo soy optimista. La frühling ya está aquí! Endlich!
ResponderEliminarBesos
Aquí las señales también se hacen notar. Los naranjos están en flor y un aroma de azahar se extiende por la ciudad. Llega la primavera.
ResponderEliminarPor cierto... gracias ;)
ResponderEliminarhttp://www.flickr.com/photos/7394371@N06/2294995363/
Estaba riquísimo!!!!!!! Creo que va a convertirse en un clásico de casa
Hola, Marona
ResponderEliminarTe leo desde hace unos días y me encanta tu blog. yo vivo en Cartagena y aunque aquí prácticamente siempre es primavera, ahora es el momento mágico en que se hace más presente, cuando el sol entra a mediodía en mi patio, donde me instalo con el ordenador mientras se termina la comida, es el tiempo más bonito de todo el año, cuando uno no tiene más remedio que ser feliz.
A mi pareja y a mi nos gusta el sauerkraut y la sopa, así que algún día probaremos tu receta.
Herzliche Grüsse aus Cartagena!!!
Esta la pruebo... además, tengo de todo en casa... (eso sí, la haré sin chorizo, je, je)...
ResponderEliminarYa te contaré...
Hoy en el Paseo del Prado (donde el museo) olía a estiercol recién extendido y los prunus están a reventar de flores...
ResponderEliminaribán, una de las cosas de las que más se quejan los españoles que me encuentro por aquí es del tiempo. Y a mí me encanta que haya contraste entre estaciones, supongo que para mi es algo "exótico" acostumbrada al clima benigno del Mediterráneo.
ResponderEliminarAhí va un tazón por mensajero urgente.
¿Verdad que mola el Erdäpfelkäs? Jejeje... ya iré poniendo otros untes típicos austríacos ricos...
con ka, maldita congestión, me estoy perdiendo el auténtico olor de la primavera... nchts!
boomings, jooo... que difícil... sustituir la col en una sopa de col... voy a pensar... mmmh
paco, hombre, eso del optimista y el pesimista es según se mire... porque si te gusta el invierno casi es más optimista decir que aún se queda con nosotros un rato que decir que se va :D
biznaga, jopetas, que envidia mas mala me entra... yo con mi "eau de vache" y tu con aroma a azahar... ¡no es justo! ;)
lolah, bienvenida!!!! Yo aún estoy pensando qué estación es mi preferida. Porque el otoño me gusta mucho, mucho, mucho... me parece más fácil ser feliz en octubre que en mayo :)
delokos, bueno, ya puse ideas para una versión vegetariana... ya me contarás.
mar, anda, llega hasta allí el tufillo de vaca?? :D:D:D
Muchas gracias a todos por los comentarios!!!! Abrazos primaverales!!!!!