lunes, 26 de enero de 2009

Todo el mundo está en casa

Después de andar haciendo el cabra por el monte todo el domingo (otra vez), ya al anochecer, tomamos el coche para volver a la ciudad. En vez de ir por la autopista, vamos por la carretera y en unos pocos minutos todo se vuelve oscuro. Afuera está todo negro y el interior del coche se ha transformado en una fiesta de números verdes y flechas rojas.

Ya se acaba el fin de semana, mañana se vuelve al trabajo, a la rutina. Es una sensación de desasosiego que me acompaña desde que comencé a ir a la escuela.

Pero entonces miro por la ventanilla, hacia la oscuridad, y veo decenas de casas con las ventanas iluminadas en tonos ocres. ¡Todo el mundo está en casa! Me imagino a la gente con la bata puesta, dándose un baño, tomándose un vino, leyendo otro capítulo antes de la cena... apurando el fin de semana... y entonces es cuando me entran ganas de estar en casa a mí también. De llegar y darme un baño, ponerme la bata y encender el horno para preparar el desayuno para la cena.

desayuno para cenar
Cacerola de desayuno: pan, huevos, leche, queso y cositas ricas para un pudding salado la mar de reconfortante

La receta, la podéis encontrar aquí. Yo sólo adapté las cantidades a dos personas (aunque salió comida para tres) y como ingredientes adicionales le puse puerros y champiñones salteados. Como mi pan tenía semillas de cilantro infusionó un saborcillo muy rico al plato.

Porque sin huevos no hay hogar que valga, y no estoy sola en esta afirmación, ya soy la tercera que piensa así.

¡Feliz comienzo de semana!

12 comentarios:

  1. Buenos días, Mar, yo también he sentido a veces una sensación casi de envidia al ver las ventanas iluminadas, sobre todo en las tardes de invierno...
    Muy apetitoso el pudding salado, para echarle todo lo que encuentres por la nevera.
    Un beso.

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  2. Nos alegramos de que hayas hecho el cabra por el monte, ya que con toda seguridad has disfrutado de lo lindo.

    También nos alegramos de este desayun tan especial que has preparado y te deseamos una feliz semana.

    Besotes,

    Ana y Víctor.

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  3. Efectivamente, confort food del bueno, para comer con bata de felpa y toalla en la cabeza.Me encanta como describes el domingo por la noche.
    B.

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  4. A mi una de las cosas que más me gusta del mundo cuando voy de copiloto es intentar ver el interior de las casas iluminadas. Mi marido me dice que soy una cotilla,pero me gusta, que le voy a hacer.
    Ese gratinado tiene una pinta espectacular. No sería capaz de desayunarlo, pero a medio día o a esta horita, si me zampaba un platito, la verdad.
    Besitos sin gluten y feliz vuelta a la semana

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  5. Mar, el millor que et pot passar quan vas de copilot, es que es faci de nit, i que les gents a les seves cases tinguin persianes i cortines obertes, així tu, albires encara que sigui de passada la vida quotidiana de les persones que conformen una vila o ciutat... el ritme diferent que porten en vers tu, que vas en cotxe.. i poder veure les petites escenes viuen... em passa exactament com a zerogluten! cotilles res de res, sinó interessades per la vida dels teus veïns ;.)
    Fanàstica recepta per començar el dia. mil petons bonica.

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  6. Hola marona. Mi cabeza no está hoy en condiciones de comprender la receta en inglés (yo debería ser de esos que están en casa, pero el trabajo obliga); en cuanto mi cuerpo vuelva al sendero de la "normalidad" pienso leerla bien e incluso prepararla.
    Te escribo principalmente para decirte que somos muchos los que pensamos igual acerca de los huevos. Mi madre, cuando compré mi casa y sólo tenía montada la nevera, me dijo que tenía que tener huevos, aceite y patatas, que eso es lo mínimo imprescindible para un hogar y si no, no hay hogar. Y esa frase la tengo ahí grabadita.
    Un saludo, me encanta tu blog.

    Okkar

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  7. Ay, me has recordado a mí misma cuando era niña. Pasabamos los fines de semana en el campo, y el domingo tarde-noche tocaba volver a la ciudad; ese viaje me resultaba muy deprimente, encima era lunes al día siguiente! Pero según pasaba el coche la sierra, al fondo del valle se veía Murcia iluminada; me encantaba esa imagen con el cielo aún con algunos tonos azulones.
    Y al fin y al cabo, no hay mejor manera de terminar una semana que en casita, tras un baño, en bata y con buena comida casera :)

    Que hayas tenido un estupendo lunes!
    Un beso

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  8. Nosotros llegamos en cambio a casa a preparar una pizza... Las ventanas iluminadas me producen la misma sensación, mezclada siempre con mucha curiosidad: qué estarán cocinando? :)
    La cacerola de desayuno? Aquí no pasaría de la cena seguro, con la pinta que tiene.
    Muchos saludos,
    Marcela

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  9. Qué le voy a hacer, yo tb soy así, me encanta mirar a través de las ventanas e imaginar cómo son esas estancias y quién habita en ellas.
    Ese es un desayuno para mi de un ayuno largo, sería incapaz de comer tanto.
    Ya pasó el primer dia de semana, uno menos para que llegue el próximo.
    En petó

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  10. Que mejor pasatiempo hay que intentar adivinar la vida de los que pasan por nuestro lado? me encanta...aunque tal vez si luego conociera la realidad no tendria nada que ver con lo imaginado...una muy buena receta para empezar la semana!!

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  11. ¡¡¡Buenas tardes!!! Me alegro de haber descubierto toda la curiosidad escondida que tenéis ;)
    y una aclaración, el pudding es un desayuno pero lo tomamos para cenar, delante de un dvd y envueltos en una mantita... jejeje

    Lolah, eso es lo que más me gusta de este tipo de recetas, abres la nevera y la vacías en el horno ;)

    Ana y Víctor, jo, que si disfruté... hay días que deberían quedar marcaditos en el calendario por su perfección.

    CRIS, gracias, así es como vivo los domingos desde que era pequeña, cuando tocaba baño y cena a base de leche y avena o pan... mmmh...

    Zerogluten, y al llegar a casa me encanta mirar hacia arriba del bloque y ver cuántas luces hay de los vecinos, entonces también digo lo de "está todo el mundo en casa"

    La cuina vermella, bueno, en teoria era per començar-lo, però jo el vaig acabar... jejejeje

    Okkar, La receta tampoco tiene mucha complicación: por cabeza: dos huevos, media taza de leche una rebanada de pan a dados y media de queso rallado. El resto de ingredientes se dejan al gusto del consumidor. Horno medio unos tres cuartos de hora (aunque depende de cómo de cuajados te gustan los huevos, claro)¿Para ti también son los huevos imprescindibles? ¡Pues ya somos cuatro!

    Akane, gracias, guapa. Pues esta costumbre mía viene de lejos, de cuando era chiquita y, cómo tú, pasábamos los fines de semana en la playa y volvíamos el domingo por la noche.

    Marcela, no, si esta pobre tampoco pasó de la cena... jajajaja

    marisabel, yo tampoco lo comí para desayunar (aunque poder, yo podría) fue una cenita de domingo por la noche.

    Maria Jose, la verdad es que se pasa el rato estupendamente. Debería contar como hobby :)

    ¡Un abrazo y gracias por los comentarios!

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  12. la teva foto te millor pinta ;)
    Un petó

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