Esta vez, se transformaron en mermelada...
Mermelada de sanguinas y rooibos (adaptada de la revista "Lecker" de enero/febrero)
Ingredientes (para dos tarros medianos)
un par de bolsitas de té rooibos
muchas naranjas sanguinas (suficientes para sacar 200 g. de pulpa y 400 ml. de zumo)
500 g. de azúcar gelificante
Preparar un té con el rooibos y una taza pequeña de agua (200 ml). Mientras, lavar las naranjas con agua caliente y quitarles la piel (sin la parte blanca). Cortar la piel a juliana muy fina. Cortar los filetes de las naranjas separando la pulpa de las pieles. Pesar unos 200 g. de la pulpa. Hacer zumo con las naranjas restantes (medir 400 ml.).
Mezclar el té con el zumo, pulpa y piel de las naranjas. Ponerlo todo en una cacerola con el azúcar y cocer hasta que haya espesado lo suficiente. Meter en los tarros limpios, darles la vuelta y dejarlos enfriar al revés.
La verdad es que quedó bastante espesa... ¡casi gelatina! pero el sabor es dulce y bien rico, sobre todo con pan blanco crujiente mojado en café au lait, al más puro estilo Justine ;D;D
¡Salud!
Jua, jua, jua... No me digas que tú también veías a Justine y a Hèlene et les garçons. Jua, jua, jua....
ResponderEliminarLa mermelada creo que la probaré. Hasta ahora por aquí no se veían muchas naranjas sanguinas, pero este año es la invasión...
Saludos
Pues yo nunca he visto estas naranjas en mis fruterías, pero voy a tener que poner empeño porque la verdad es que tienen un color precioso.
ResponderEliminarTe ha quedado una mermelada más que apetecible.
Besitos sin gluten
En zumo están muy, pero que muy ricas, y ¡vuelan!
ResponderEliminar¡Qué fuerte! :D Acabo de volver a la adolescencia, juas juas, ya no me acordaba de esta serie, y eso que me la vi casi entera!
ResponderEliminarEn cuanto a las naranjas, qué te voy a contar, la última vez caímos y nos llevamos 6 kilos... por el cubo que venía de regalo! XD
Con rooibos! Qué idea tan buena, tengo que probarlo!
ResponderEliminar¿No es genial empezar el día con un buen pan bien untando con mermelada casera?
Curiosamente la mermelada de naranja es de mis favoritas (dulce o amarga) pero nunca la he intentado hacer. Las naranjas, sanguinas o no, suelo gastarlas (y a una velocidad demasiado alta) tomándolas solas, a gajos, como si fueran mandarinas. Me gustan demasiado!
PD. El otro día fui al médico y me dijo que tenía las manos naranjas, que no comiera tantas... no sé si bromeaba ^^U
Esto si que es original mezclar roiboos en una mermelada, trato de imaginarme el gusto pero no peudo reproducirlo, sin duda será una de esas recetas para experimentar.
ResponderEliminarAra mateix sóc a la feina, amb una gana que m'impedeix ni tan sols pensar i em trobo això! hahahaha. És una molt bona idea per aprofitar la fruita (jo en compro poca perquè no es faci malbé), però la veritat és que em veig incapaç de fer melmelada (del tipus que sigui) i molt menys que em quedi així de bé.
ResponderEliminarJusto el otro día me compré un kilito en el mercado, no es habitual verlas por aqui, al menos, donde yo frecuento. Me sorprendió su sabor especial...pero ya no me atrevo con las mermeladas ;)
ResponderEliminarHola! Muy buena la mermelada.Aqui tengo muy mano estas naranjas (vivo en Trieste Italia) He visitado Salzburg y me ha encantado sobre todo no me contengo a comer bretzel. Tu blog es muy divertido. Un beso. Sil
ResponderEliminarQué ganas de hacer esta mermelada... justamente ayer compré unas cuantas, pero aquí nos llegan desde muy lejos, y no están tan baratas :-) (tenías que ver lo que pagamos en estas fechas, al final del invierno, por un pimiento... tenemos ganas de que llegue el deshielo, y por más de una razón). Entretanto, yo tengo un pongo (qué bueno) de calabacines para entretenerme. Uy, qué mal suena eso. :-D
ResponderEliminarEsta mermelada tiene que estar buena, y con el roibois ya, qué curiosidad, yo las tomo en zumo pero no se me había ocurrido hacer mermelada. Qué detalle el panecito abierto, dan ganas de picar ehhh.
ResponderEliminarUn abrazo :))))
Uff hace mil años que no veo esta clase de naranjas, cuando era peque me daban yuyu y ahora aqui ya no las encuentro...besosssss
ResponderEliminarMaría, ¡claro que las veía! si no, ¿de dónde iba yo a sacar la idea de mojar la baguette con mermelada en el café con leche? :D:D:D:D
ResponderEliminarZerogluten, yo las recuerdo de cuando era pequeña y cuando las redescubrí aquí me hizo mucha ilusión, porque son muy especiales.
Noema, en zumo es mi manera favorita de tomarlas, además queda de un color precioso :)
Ka, el cubo es la mar de práctico, jajajajaja... y las series, sabía que yo no era la única que se las tragaba, lo sabía...
Akane, buenooo... la verdad es que el pan con mermelada yo me lo tomo a cualquier hora del día... ¡hasta de postre!
CRIS, está muy rica, aunque la verdad el rooibos queda muy camuflado con el sabor dulce de la fruta.
Te de llimona, és més fàcil del que sembla, és entretingut però no és complicat de fer. Anima't!
Mònica, mujer, no te desanimes, la mía quedó rollo cemento pero de sabor estaba buena, así que "to p'adentro" :D:D:D:D
Sil, ¡Oh!¡Oh! ¡Trieste! La bella Italia!!! ¡Oooooooooh! Estuvimos allí la primavera pasada y volvimos enamorados.
Arantza, ya me imagino, ya... aquí hizo un amago de primavera pero el invierno volvió, la nieve, el viento... y yo ya estoy cansadita de las coles ¡¡¡Qué ganas de fresas y guisantes frescos!!! Pongo de calabacines... mmmh... ¿mermelada de calabacines?
Oxiniña, bueno, sí, mermelada, ensalada, macedonia... la verdad es que cuando te pasas comprando tienes que echarle imaginación a la cosa ;)
Maria Jose, sí, yo también las recuerdo de cuando era pequeña. En España nunca las había vuelto a ver, pero aquí están en el supermercado normal. ¡Son tan bonitas!
Gracias por los comentarios ¡Abrazos!